Parceleros denuncian intento de despojo de tierras en Los Arroyos 1, Monte Plata
Felipe de la Rosa es asignado como asesor del Cuerpo de Bomberos, Distrito Municipal de San Luis.
Felipe de la Rosa es asignado como asesor del Cuerpo de Bomberos, Distrito Municipal de San Luis.
Felipe de la Rosa es asignado como asesor del Cuerpo de Bomberos, Distrito Municipal de San Luis.
Felipe de la Rosa es asignado como asesor del Cuerpo de Bomberos, Distrito Municipal de San Luis.
De acuerdo con los denunciantes, entre los cultivos afectados se encuentran chinola, auyama, cacao, piña y otros rubros que constituyen el sustento económico de varias familias de la zona.
Jesús Alberto Guzmán Ramírez relató que en horas de la mañana el referido oficial llegó al lugar acompañado de una camioneta policial y dos agentes, procediendo a destruir una enramada utilizada para el cultivo de chinola y a remover los palos de soporte de la plantación.
“Ese coronel vino a destruir nuestro trabajo sin ninguna orden ni justificación. Hacemos un llamado al presidente Luis Abinader y a las autoridades competentes para que intervengan antes de que suceda una desgracia”, expresó Guzmán Ramírez.
Por su parte, la señora Dorca Elidia Concepción manifestó su indignación ante lo sucedido.
“Nos levantamos desde las cinco de la mañana a trabajar esta tierra, y ahora una persona que ni siquiera es de aquí quiere venir a quitárnosla. Eso no es justo”, afirmó.
Otro miembro de la comunidad, Xavier Moreno Concepción, aseguró que logró grabar parte del incidente con su teléfono celular, pero el coronel le habría arrebatado el dispositivo y borrado los videos.
“Queremos justicia. Le pedimos al presidente Abinader y a las autoridades de Monte Plata que no permitan que nos dejen en la calle”, expresó con visible preocupación.
Los parceleros también denunciaron que en otra ocasión el mismo oficial, acompañado de un contingente policial, llegó a la propiedad para cortar alambres y presionarlos a abandonar la tierra. Afirman que el caso ya se encuentra en los tribunales y solicitan que se respete el proceso judicial, así como su derecho a continuar trabajando la finca que han cultivado por décadas.